El Médico Veterinario nacido en Santa Fe es el flamante Director de la Mesa Argentina de Carnes Sustentables. La entidad apunta a sumar al supermercadismo y el transporte para una ganadería sostenible 100%.
Los integrantes de la Mesa Argentina de Carne Sustentable (MACS) informaron que se incorporó a su equipo el Médico Veterinario Abel Argüelles de Iriondo. «La profesionalización en la gestión nos permitirá profundizar y acelerar las acciones necesarias para abordar los desafíos de la institución. La contratación de un Director Ejecutivo es para la MACS un paso importante en su consolidación, evolución y crecimiento», aseguró Fernando Storni, presidente de la MACS.
Por su parte, Abel Argüelles de Iriondo sostuvo: «Mi mayor expectativa es cumplir con éxito la implementación de las actividades de la MACS inscritas en el Plan Estratégico, promoviendo el logro de los objetivos de la Asociación y contribuir a través de su desempeño, al cumplimiento de la misión de la Mesa, difundiendo y promoviendo los principios de la Sustentabilidad, Recursos Naturales; Personas y Comunidad; Sanidad y Bienestar Animal; Innovación y Alimentos».
En diálogo con Campolitoral, remarcó que hay un tema con los gases de efecto invernadero, que de por sí no son nocivos, ya que mantienen la temperatura para que se desarrolle la vida en la tierra. «El problema es cuando esas emisiones superan los índices que hasta ahora se consideraban normales. Y ahí es cuando esos gases producen algunos desastres naturales, inundaciones, tsunamis, etc. relacionados con los excesos del hombre sobre la naturaleza».
Yendo a la ganadería, asume que la actividad de hecho emite gases de efecto invernadero, principalmente metano, pero que «no es tan nocivo como los que emite la industria y el transporte. Y en este sentido, hay algo muy ejemplificador, como fue la foto satelital de Beijing antes y durante la pandemia», pone como ejemplo.
Según Argüelles de Iriondo, se descarga mucho sobre la ganadería, cuando en realidad el principal promotor de los excesos de emisiones son la industria y la deforestación. «Y en cuanto a los gases que emite la vaca como rumiante que es, ese carbono tiene una economía circular. Porque al salir al aire dura 10 años, contra los 100 o 200 años del anhídrido carbónico. Además, es captado por los vegetales para la fotosíntesis, para generar su propia estructura proteica, y a esa planta la come el animal, entonces genera un círculo de carbono que nos induce a pensar que si bien la ganadería tiene un impacto, tomar le término de balance. Balance entre lo que emite y lo que recupera. Y estamos en condiciones de afirmar que es un balance neutro».
Claro que pese a esto, «hay movimientos que le dan con un caño a la ganadería. Pero en el volumen total, la ganadería participa con un porcentaje muy menor al 1 %. Y ese es un dato duro, no una interpretación subjetiva».
Todo para mejorar
Consultado sobre los ejes sobre los que debería trabajar el país, fue claro: aumentando la eficiencia de la producción. «Tenemos un porcentaje de destete inferior al 60 % promedio país, el puntapié inicial es mejorar la eficiencia dentro del campo: los servicios, estacionarlos, IA, acompañar los ciclos anuales de la producción forrajera, y todo aquellos que permita un porcentaje a nivel país de por lo menos un 65/70 de destete. Y eso trae sus beneficios».
Respecto de la trazabilidad, reconoció que estamos yendo hacia eso, y ya se están imponiendo de manera irreversible las caravanas electrónicas que permiten incluir datos. «Es una exigencia de los servicios de sanidad animal. Trazabilidad en bloque, que se ve en las góndolas de los supermercados, y con el teléfono podes ver de dónde viene, ya hasta qué le dieron de comer».
Finalmente, destacó que la Mesa tiene unos 40 miembros activos y algunos más adherentes. Repartidos entre productores, Asociaciones de criadores y frigoríficos. Pero que están tomando el desafío de incluir al supermercadismo y el transporte para llegar al consumidor y cubrir la mayor trayectoria de la cadena de la carne.
Currículum ganadero
Argüelles Iriondo está casado, tiene 3 hijos. Nació en la ciudad de Santa Fe, y actualmente está radicado en la ciudad de Buenos Aires. Graduado de Médico Veterinario en la Facultad de Ciencias Veterinarias de la Universidad de Buenos Aires, es un profesional de trayectoria y experiencia en diferentes áreas de la producción bovina como la zootecnia, nutrición y sanidad, industria farmacéutica veterinaria, industria láctea, y consultorías en bienestar animal, sanidad animal y desarrollo de proyectos en ONG.
En su experiencia, siempre relacionada a la ganadería especialmente de carne, cuenta la de Asesor de la Fundación de Investigación y Desarrollo Agropecuario (FIDA – Ex Fundación Argentina de Bienestar Animal) de la cual fue representante ante la Global Roundtable Sustainable Beef (GRSB) en las comisiones de sanidad animal y bienestar animal; Nutrición Animal en NOWET S.A.; Técnico en la industria farmacéutica veterinaria en Biogénesis Bagó SA; Gerente de Servicios Agropecuarios en Parmalat Argentina SA; Coordinador de Programación de Luchas Sanitarias en SENASA; Gerente de la Asociación Argentina Criadores de Limousin; Inspector Zootécnico de la Asociación Argentina de Braford; y Asesor Veterinario en la Sociedad Rural Argentina.